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sábado, 26 de diciembre de 2020

[250] Divino tesoro


“Forever young” de Alphaville (1984) y “I need never to get old” de Nathaniel Rateliff & The Night Sweats (2015)

 

Llego hoy a los 250 posteos y cierra la quinta temporada del blog (que existe desde hace ya más de ocho años, me autoaplaudo un rato y sigo). Quizás termina todo aquí y me mato (conceptualmente eh, no se asusten) para seguir siempre joven, pero muy probablemente en algún momento vuelva, así que mejor no me mato nada, total yo siempre seré joven, es una de las ventajas que tiene no existir (o, si prefieren, existir apenitas).

 

Para cerrar este ciclo, qué mejor que un par de canciones sobre el tiempo, eso que todos conocemos bien pero no podemos explicar, que nos constituye y nos derrumba, que nos deja respirar y a la vez nos oxida.

 

La eterna juventud es un tema ya muy viejo, pero que se mantiene ágil en todas las artes, y en la música también. Para que se den una idea, encontré seis canciones tituladas “Forever young” (bah, técnicamente cinco, porque una se llama “Young forever”).

 

La primera es de mi amigo Bob Dylan, en 1974. Es, básicamente, una bendición. No me refiero a la canción, que es bastante aburrida, sino a lo que dice la letra: se bendice a alguien, se le desean multitud de cosas buenas y entre ellas, quizás la más importante (al menos, la que cierra el estribillo) es “que sigas joven por siempre”. La mejor versión, como de costumbre en las canciones de Bob, es la de su (y mi) amiga Joan Báez (al final del posteo irán todos los links). No está entre las buenas canciones de Bob, pero considerando que es mi amigo y además recibió el premio Nobel, hay que tener en claro que una mala canción de Bob es mil veces mejor que una buena canción de la mayoría de los demás.

 

Para muestra basta un botón: el “Forever Young” de Rod Stewart (del 86 creo que es). Siempre me gustó la voz de Rod y la música es un pelín más movida, pero la letra es, básicamente, la misma que ya hizo Bob, solo que con los versos desordenados y peor escrita. Y en el olvidable clip se nota que le canta a un chico (probablemente su hijo, pues no deja de abrazarlo), mientras viajan en la parte de atrás de un camión hacia Ohio, Lanús o Turdera.

 

En 2010, los muchachos de Madness hicieron una canción “Forever Young” que es muy linda y simpática, como todo lo que hacen ellos. La letra, más melancólica de lo que anticipa la rítmica tonada, es la única en la cual quien canta no es joven sino ya viejo; habla de lo bella que es la juventud y le pide a quien escucha “No hagas lo que hice yo: quedate siempre joven”, lo que, por supuesto, es muy fácil de decir pero, a medida que pasan los años, cada vez más difícil de lograr: para Pete Townshend (el cantante de The Who) era muy fácil cantar “Ojalá me muera antes de llegar a viejo” (“My generation”, posteo 152) cuando tenía veinte años, pero haberlo cantado millares de veces no le impide tener hoy 75 y sentirse contento con su tiempo verbal.

 

Hay, además, dos canciones “Forever young” (y “Young forever”) que no están en inglés (salvo partecitas del estribillo) sino en coreano, pues son de sendos y famosos grupos de K-pop: Blackpink (de chicas) y BTS (de chicos). Las canciones son absolutamente insufribles y solo pueden ser soportadas (apenas) si les gusta ver a jovencites lindes con cutis perfectos bailando y poniendo caritas. Si mutean los clips todo mejora, incluso.

 

Pero la mejor “Forever young” (para mí y para muchos) es la de Alphaville, de quien ya comentamos “Big in Japan” (posteo 66). Aquí los sintetizadores al mango y una toma de las estrellas nos invitan a un típico “lento” ochentoso, pero bastante oscuro (Marian Gold aparece con su peinado pero sin sus famosos gestitos picarones [salvo en el 1:37, ahí se le escapó una miradita], iluminado como con una linterna desde abajo) y tiene la gran virtud de retratar una época precisa, la de la Guerra Fría y la amenaza atómica (que ya vimos en varias canciones en el blog, como “99 Luftballons” de Nena, posteo 164). Al igual que “My generation”, esta letra propone (en una forma menos directa) que es mejor darle gas al carpe diem, aprovechar el hoy (“Bailemos con estilo, bailemos un buen rato”) y morir mientras somos jóvenes, en lugar de dejarnos desfallecer lentamente (“¿van a tirar la bomba o no?”). En el clip, los músicos de Alphaville bajan de una especie de rombo estelar (¿de qué planeta viniste, barrilete cósmico?) y dejan deslumbrados a todos con su belleza, su juventud y sus overoles, de forma que tanto niños como viejos (bastante linyerosos todos) deciden irse con ellos al Rombo de las Estrellas. Está bien, es medio volado el clip, lo acepto, pero la canción es preciosa, incluso con esos horrendos sintetizadores que por suerte ya envejecieron (pero ahora se oyen cosas peores, no me hagan hablar que parezco viejo cascarrabias).

Es, en fin, una gran canción. La letra tiene algunos detalles muy profundos; retrata por ejemplo (como “Clint Eastwood” de Gorillaz) una juventud inútil y despojada de todo poder, pero abierta a las posibilidades que tendrá para ellos el futuro: “no tenemos el poder pero nunca decimos nunca”.

 

Y culmina con el breve estribillo en el que se afirma (sin decirlo abiertamente) que para ser siempre joven hay que saber morirse a tiempo, porque, como ya se dijo, “la juventud es como diamantes al sol / y los diamantes son para siempre”:

 

Por siempre joven, quiero ser por siempre joven.

¿De verdad quieres vivir para siempre?

 

https://www.youtube.com/watch?v=t1TcDHrkQYg



Forever young

 

Let's dance in style, let's dance for a while

Heaven can wait

we're only watching the skies

Hoping for the best

but expecting the worst

Are you going to drop the bomb or not?

 

Let us die young

or let us live forever

We don't have the power

but we never say never

Sitting in a sandpit, life is a short trip

The music's for the sad men

 

Can you imagine

when this race is won?

Turn our golden faces into the Sun

Praising our leaders

we're getting in tune

The music's played by the mad men

 

Forever young, I want to be forever young

Do you really want to live forever?

Forever, and ever

Forever young, I want to be forever young

Do you really want to live forever?

Forever young

 

Some are like water,

some are like the heat

Some are a melody and some are the beat

Sooner or later they all will be gone

Why don't they stay young

 

It's so hard to get old without a cause

I don't want to perish like a fading horse

Youth's like diamonds in the Sun

And diamonds are forever

 

So many adventures couldn't happen today

So many songs we forgot to play

So many dreams swinging out of the blue

We let them come true

 

Forever young, I want to be forever young

Do you really want to live forever?

Forever, and ever

Forever young, I want to be forever young

Do you really want to live forever?

Forever, and ever

Por siempre joven

 

Bailemos con estilo, bailemos un buen rato,

el Paraíso puede esperar,

solo estamos mirando los cielos

queriendo lo mejor

pero esperando lo peor

¿van a tirar la bomba o no?

 

Déjennos morir jóvenes

o vivir para siempre,

no tenemos el poder

pero nunca decimos nunca

Sentados en un arenero, la vida es corta,

la música es para los hombres tristes.

 

¿Puedes imaginar

cuando se gane esta carrera?

Giraremos nuestros rostros dorados hacia el sol

alabando a nuestros líderes,

ya vamos cazando la onda

la música es tocada por los hombres locos.

 

Por siempre joven, quiero ser por siempre joven

¿De verdad quieres vivir para siempre?

Por siempre y para siempre,

siempre joven, quiero ser joven por siempre

¿De verdad quieres vivir para siempre?

Por siempre joven.

 

Algunos son como el agua,

otros son como el calor;

algunos son una melodía y otros son el ritmo

tarde o temprano todos se irán

¿Por qué no se mantienen jóvenes?

 

Es tan difícil envejecer sin una causa,

no quiero perecer como un caballo agotado

la juventud es como diamantes al sol,

y los diamantes son para siempre.

 

Tantas aventuras no pudieron ser hoy,

tantas canciones olvidamos tocar,

tantos sueños balanceándose de repente,

dejémoslos que se vuelvan realidad.

 

Por siempre joven, quiero ser por siempre joven

¿De verdad quieres vivir para siempre?

Por siempre y para siempre,

siempre joven, quiero ser joven por siempre

¿De verdad quieres vivir para siempre?

Por siempre joven.


Por más buena que esté la canción, el mensaje es bastante melancólico y ambiguo, así que preferí cerrar la temporada con otra canción más joven y alegre, “I need never to get old” (“Necesito no envejecer nunca”) de Nathaniel Rateliff & The Night Sweats (“Los Sudores Nocturnos”), una banda que hace rythm and blues clásico.

Es una hermosa canción de amor, donde el cantor le dice a su persona amada que más allá del qué dirán y de lo que los demás creen que pasa entre ellos dos, él necesita su amor, y necesita que ella le diga que ese amor es real, que existe. Y reafirma que necesitaba hacer lo que hizo (intentar, derrumbarse, enamorarse) y que necesita ahora, para seguir sosteniendo ese amor, no envejecer nunca (que suena parecido a ser “por siempre joven”, pero para nada es lo mismo).

El clip es encantador y desopilante, y muestra, en un estudio, la grabación de esta misma canción: “toma 1”, muestra la primera placa, y los músicos empiezan, con toda la energía y el entusiasmo. Pero en el 0:50 se lo ve a Nathaniel escuchando la toma y decidiendo que no va, así que pasan a la “toma 2”. Empiezan a verse discusiones, se prueban más y más variantes, ninguno de los demás músicos sabe qué mierda es lo que quiere el cantante y ya van por la “toma 32”, el cantante prueba el sonido en la sala vacía, se pelea con el sonidista, “toma 150”, ya los músicos tienen un embole que se quieren morir, 1:30 se van a las manos, ya canta con la panza al aire y sin paciencia y con cascos de bombero, “toma 200”, prueba tocar la guitarra con un arco de violín, ya no sabe qué más intentar, solo mientras los demás lo miran desde afuera como si fuera un mono en el zoológico, se tira al piso, “toma 500” y en el 2:13 prueban poner a cantar al baterista (a lo Foo Fighters) pero es tacleado por el rencoroso Nathaniel, “toma 1000”, canta mordiendo una chala de choclo o con la cabeza en una pecera, nada funciona, prueba con un coro de iglesia, con los compañeros de banda vestidos de coro de iglesia, a dúo con un gato o a la luz de una vela y nada, no hay caso, llega la “toma 3201” y aunque la alfombra es un desastre, vemos que todos ya son viejos y canosos y llenos de achaques pero tocan otra vez con ganas y todo sale, por fin por fin, como tiene que ser, y hacia el final todos esperan, esperanzados, el veredicto de Nathaniel sobre esa toma impecable y final. Un gran videoclip.

 

https://www.youtube.com/watch?v=-2hxU4UG3dA


I need never get old

 

Can we be there?

Oh, just think of the time!

Thought of love so strange

Said you never knew

While I try my best

To cover our eyes

It's a common way to blame

and hide the truth

I know that some will say

it matters, but little babe

Oh, but, come on and mean it to me

I need it so bad.

 

I needed to try

I needed to fall

I needed your love

I'm burning away

I need never get old

 

Taking our time

Ah just standing in the rain

Meaning what you said

ah and mean it to me.

All of these lies

Oh and never again

Come on and say it now

say it's a game.

I know that some will say

It matters but little babe

Oh but come on and mean it to me

I need it so bad

 

I needed to try

Needed to fall

I needed your love

I'm burning away

I need never get old.

Necesito no envejecer nunca

 

¿Podemos estar ahí?

¡Oh, pensá nada más en la hora!

Una idea de amor tan extraña,

se dijo que nunca se sabe

mientras hago lo que puedo

para tapar nuestros ojos.

Es una forma común de culpar a otros

y esconder la verdad,

sé lo que algunos dirán,

tiene sentido, pero bebé,

oh, dale, vení y decímelo en serio:

lo necesito tanto.

 

Necesitaba intentar,

necesitaba caer,

necesitaba tu amor,

estoy ardiendo,

necesito no envejecer nunca.

 

Nos tomamos el tiempo

ah, tan solo parados bajo la lluvia.

Pensá lo que decís

ay, y decímelo en serio.

Todas esas mentiras

oh, ya nunca más.

Vení y decilo ahora:

decí que estamos en juego.

Sé lo que algunos dirán,

tiene sentido, pero bebé,

oh, dale, vení y decímelo en serio:

lo necesito tanto.

 

Necesitaba intentar,

necesitaba caer,

necesitaba tu amor,

estoy ardiendo,

necesito no envejecer nunca.

 

Para cerrar, van los links a las “Forever young” mencionadas.

- La de Bob Dylan (por la premio Nobel a la mejor voz, Joan Baez):

https://www.youtube.com/watch?v=-4UoJ47SzjA


 

Forever young

 

May God bless and keep you always,

May your wishes all come true,

May you always do for others

And let others do for you.

May you build a ladder to the stars

And climb on every rung,

May you stay forever young.

.

May you grow up to be righteous,

May you grow up to be true,

May you always know the truth

And see the lights surrounding you.

May you always be courageous,

Stand upright and be strong,

May you stay forever young.

 

May your hands always be busy,

May your feet always be swift,

May you have a strong foundation

When the winds of changes shift.

May your heart always be joyful,

May your song always be sung,

May you stay forever young.

Por siempre joven

 

Que Dios te bendiga y te cuide siempre,

que todos tus sueños se cumplan,

que siempre actúes en favor de los demás

y los demás lo hagan por ti.

Que armes una escalera a las estrellas

y subas cada peldaño,

que sigas siendo por siempre joven.

 

Que crezcas para ser justo

que crezcas para ser honesto,

que siempre sepas la verdad

y veas las luces alrededor de ti.

Que siempre seas valiente

de pie, la vista adelante y fuerte,

que sigas siendo por siempre joven.

 

Que tus manos estén siempre ocupadas,

que tus pies sean siempre ágiles,

que tengas una base firme

cuando soplen los vientos del cambio.

Que tu corazón sea siempre alegre,

que tu canción sea siempre cantada,

que sigas siendo por siempre joven.

- La de Rod Stewart, con el pelirrojín sedado:

https://www.youtube.com/watch?v=q1F6I-y6lIQ


 

- La de Madness:

https://www.youtube.com/watch?v=2qUof0PpqF8


 

- La de Blackpink:

https://www.youtube.com/watch?v=qa51zme-oxs


 

- La de BTS:

https://www.youtube.com/watch?v=LbvE0FV_70U


 

Y eso es todo por hoy. Que estén sanos y bien, y sigan jóvenes todo lo que puedan, como haré yo (un tip: descubrí que dormir catorce horas por día ayuda).

Se despide hasta siempre el siempre joven pero casi nunca despierto:

DJ Vago 

domingo, 20 de diciembre de 2020

[249] Primera Grieta

“Zamba de Vargas”, anónimo argentino del siglo XIX, por Los Quilla Huasi (1956) y Los Chalchaleros (1959) 


Esta es, todos dicen, la primera zamba que existió. Uno tiende a creer que todo lo que tiene más de cien años existe desde siempre, pero sepan que no: hubo una primera empanada, un primer tango, un primer álbum de figuritas, una primera torta de cumpleaños, un primer posteo en este blog ("Zombie", de los Cranberries) y también una primera zamba, que es esta, la “Zamba de Vargas”.

Es una pieza musical que tiene, además de dos versiones completamente distintas de música y de letra, toda una historia, y además de la historia, una leyenda. Y detrás de la suave y simpática melodía hay una verdad nada poética, repleta de sangre, traiciones y desgracias.

La historia refiere al episodio que se relata en la letra, que fue la batalla del Pozo de Vargas el 10 de abril de 1867, una de las batallas más sangrientas de la historia argentina y último gran alzamiento federal, liderado por el caudillo riojano-catamarqueño Felipe Varela, contra la hegemonía unitaria, encarnada en el entonces presidente nacional, Bartolomé Mitre. Varela vino desde Chile, con tropas formadas por unos pocos chilenos y miles de riojanos y catamarqueños, para intentar hacer valer la rebelión de algunas de las provincias norteñas, despedazadas por el gobierno nacional, entre la asfixia económica, la proscripción del partido federal y las levas para la guerra (la mayor parte de las tropas enviadas al Paraguay fueron conscriptos de las provincias del Norte).

[Mini digresión: Varela había sido uno de los muy pocos que protestaron con fervor contra la Guerra del Paraguay (1864-1870), uno de los episodios más vergonzosos y lamentables de la historia argentina y latinoamericana, por la cual Argentina (ya gobernada por Mitre), Brasil y Uruguay se unieron en favor de los intereses británicos para destruir a sangre y fuego al Paraguay y evitar que se consolidara como una potencia industrial y política en la región.]

La leyenda de esta canción sostiene que la zamba fue creada en el fragor del combate por los músicos que había entre las tropas, y que los acordes insuflaron valor y entusiasmo a los guerreros, que bailaban incluso durante la refriega.

La batalla en sí fue una carnicería. Los federales de Felipe Varela eran más de 4.000, muchos más que los nacionales (unitarios) liderados por el santiagueño Antonio Taboada (unos 2.100); pero mientras que los federales estaban armados con lanzas y sables y dos tristes cañoncitos, los nacionales (preponderantemente santiagueños y tucumanos) tenían 1.600 modernas carabinas Sharps y una importante artillería. Como se queja  con amargura un verso de una de las versiones “riojanas” de la canción:

¡Lanzas contra fusiles!

Pobre Varela,

que bien pelean sus tropas

en la humadera:

¡otra cosa sería

armas iguales!

 

Además, un detalle no menor: en una gran sequía, las tropas federales venían sin agua y sin beber desde hacía varios días, agotadas y sedientas; todos los pozos de agua de la zona (alrededores de la ciudad de La Rioja) estaban secos, salvo ese, el Pozo de Vargas. Eso fue aprovechado por las fuerzas nacionales, que utilizaron como “cebo”el pozo de agua, y organizaron allí el escenario del combate.

Si bien en un primer momento la carga de la montonera federal rompió las filas nacionales y la contienda parecía inclinarse hacia los de Varela, eventualmente la enorme diferencia en armamento y en el estado general de los soldados fue diezmando a los federales (además, las trincheras y lo accidentado del terreno conspiraron contra la eficacia de la caballería federal). Luego de pelear todo el día, cuando al anochecer Varela dio la orden de retirada, el desastre había sido consumado: le quedaban solamente 180 hombres, de los más de cuatro mil con que había comenzado el día. La victoria había sido definitiva, total, y de los nacionales.

Pero la leyenda de esta canción también tiene, como la canción misma, dos versiones. En la “versión santiagueña” de esta canción, la letra expresamente indica que Taboada (el comandante de las fuerzas nacionales) fue quien ordenó a sus músicos (ambos bandos tenían banda de música, como parte de la tropa) que tocaran una melodía, y estos improvisaron esta zamba, y por lo tanto la zamba es responsable también de la victoria militar. La otra versión dice que la melodía surgió del otro lado, del federal, como una zama-cueca chilena, y que los nacionales, luego de la batalla, “se robaron” la canción, como solían (¿suelen?) hacer los porteños con todo lo que fuera del Norte.

Perdón por toda esta intro histórica, pero se hacía necesaria, en esta ocasión, para entender un poco más por qué esta zamba, esta primera zamba, es también uno de los primeros testimonios musicales de la gran Grieta argentina, que nació antes de 1810 y perdura (con otros nombres, con improvisados disfraces) hasta nuestros días: la de Unitarios contra Federales. Y si bien la historia oficial dice que todo eso terminó (y la Casa de Gobierno, por ejemplo, es Rosada porque aúna el rojo federal con el blanco unitario), lo cierto es que no terminó nada y que, como en Pozo de Vargas, parece que van a ganar los federales, pero los que ganan al final (al menos hasta hoy) son siempre los unitarios.

La “versión santiagueña” de esta versión es la más popular, y es también un canto victorioso: se cuenta cómo, luego de la valerosa arremetida de las tropas de Varela (que “toca a degüello”, cruel y sanguinario), a veces llamados “los chilenos de Varela” (aunque había muy pocos chilenos entre ellos), fueron finalmente superados por el valor de los “santiagueños” de Taboada (a veces llamado Manuel, aunque Manuel Taboada estaba al frente de la artillería, y el comandante era Antonio Taboada, su hermano), entusiasmados por los acordes de esta misma zamba (cómo una zamba improvisada durante un combate puede relatar el final de ese mismo combate y logra contar cómo afecta a las tropas eso que está sonando en ese mismo instante es casi ciencia-ficción, a la explicación esa te la debo).

La otra, la “versión riojana” de los perdedores, tiene una letra menos descriptiva, que pone el foco en el comienzo de la lucha, con el impactante inicio “¡A la carga, a la carga! / dijo Varela”.

Ambas versiones, aunque completamente diferentes, son muy bellas, en mi opinión. La más conocida, como dije, es la santiagueña, mientras que la riojana suele oírse mucho menos. Pero no hay que caer en el engaño de pensar que este relato es sobre una pelea entre provincias y que unos fueron más valientes que otros, más “machos” que otros: Pozo de Vargas fue una pelea entre tropas rebeldes (federales) contra el Ejército nacional (unitario), y como en toda batalla, el resultado nunca es para festejar, por más valerosos que hayan sido los contendientes. Ese día de 1867 fue una jornada negra para toda la Argentina.

Las dos versiones fueron grabadas por dos de los más afamados grupos folclóricos argentinos: Los Quilla Huasi grabaron la “versión riojana” en 1956, y Los Chalchaleros la “versión santiagueña” tres años más tarde. Y si bien hay decenas de grandes versiones, instrumentales o cantadas (Roberto Rimoldi Fraga, por ejemplo, grabó en el centenario de la batalla una versión riojana más rápida, en estilo zamacueca, que le quedó preciosa; Eduardo Falú grabó uno de las mejores covers instrumentales de la versión santiagueña), creo que las versiones de Los Quilla Huasi y Los Chalchaleros siguen siendo, incluso hoy, las principales referentes de esta zamba.

Aquí van. Empiezo por la bella versión de Los Quilla Huasi, referente de la “versión riojana”, que termina con unos versos picarescos (“las ganas de quererte / no se me quitan”) que no tienen nada que ver con el resto de la zamba y reúne las cosas que dijeron, durante el combate, algunos de los principales líderes de las tropas, además de indicar algunas de las estrategias militares desarrolladas (“Batallón Laguneros / de dos en fondo”).


Zamba de Vargas

“¡A la carga, a la carga!”,

dijo Varela.

“¡A la carga, artilleros!”

zambita, “¡rompan trincheras!”

 

“¡Rompan trincheras!”, cierto,

dijo Elizondo.

Batallón Laguneros,

zambita, de dos en fondo.

 

“¡A la carga, a la carga!”,

dijo Taboada.

“Si esta guerra no gano”,

zambita, “no cargo espada”.

 

“¡A la carga , a la carga!”,

dijo Chumbita.

Las ansias de quererte,

zambita, no se me quitan.

 

Ahora, la de Los Chalchaleros, impecable también, referente de la “versión santiagueña”, donde se confunde el nombre de pila de Taboada (es que “Manuel” quedaba mejor con la métrica del veso), se detallan más los eventos de la batalla y la participación de la música como arma decisiva (para la victoria de los nacionales, que en esta versión pelean “por la patria”, como si los riojanos los hubieran invadido a ellos, y son llamados “los santiagüeños”).


 

Zamba de Vargas

Forman los riojanos

en Pozo 'e Vargas.

Los manda Varela,

firme en batallas.

Contra los santiagueños

con gran denuedo, van a pelear.

Ya Don Manuel Taboada

alza su espada: se ve brillar.

 

Atacó Varela

con gran pujanza

tocando a degüello

a sable y lanza.

Se oyen los alaridos

en el estruendo de la carga

y ya pierden terreno

los santiagueños de Taboada.

 

“Bravos santiagueños”,

dijo Taboada,

“vencer o la muerte,

vuelvan su cara.

Por la tierra querida

demos la vida para triunfar”,

Y ahí nomás a la banda

la vieja zamba mandó a tocar.

 

En el entrevero

se alzó esta zamba

llevando en sus notas

bríos al alba

y el triunfo consiguieron

los santiagueños y este cantar

para eterna memoria

“Zamba de Vargas” siempre será.

 

Y como cierre, las otras dos versiones mencionadas:

- Por Rimoldi Fraga, la “versión riojana” con ritmo de zamacueca y voz memorable.

https://www.youtube.com/watch?v=Xkr8bQ9XTEk


 

- Por Eduardo Falú, “versión santiagueña” instrumental.

https://www.youtube.com/watch?v=9CR8AxbTHcM


 

Y eso es todo. Muero de sed y veo un pozo de agua ahí a lo lejos. Allá voy.

DJ Vago