“The end of the beginning” (“El final del comienzo”), de Black Sabbath (2013), y “Wheels” (“Ruedas”), de Foo Fighters (2009)
You do me wrong to take me out o' th' grave.
Thou art a soul in bliss, but I am bound
Upon a wheel of fire, that mine own tears
Do scald like molten lead.
(Haces mal en sacarme
de la tumba.
Tú eres un alma
bendita, pero yo estoy atado
a una rueda de fuego, y
mis propias lágrimas
me queman como plomo
derretido.)
Lo escribió Willy Shakespeare,
en Rey Lear, acto 4, escena 7.
¿Este es el final del comienzo? ¿O el comienzo del final?
Créanlo o no, tenía estos temas preparados y agendados para
hoy desde hace meses, así que no lo seleccioné pensando en los resultados de
las elecciones de ayer. Pero creo que se ajustan a la perfección a la situación
de hoy, y que ustedes podrán al escuchar estas canciones, si les fue mal ayer,
tomar impulso para suicidarse definitivamente; y si les fue bien, ilusionarse
con que esté llegando el comienzo de un final, y la rueda de fuego del destino
esté por fin por comenzar su camino hacia arriba.
Puede pensarse, a partir de esto que digo, que me da igual
lo que sucedió en las elecciones y que soy apolítico. No es así. De hecho, estoy
desde hace añares afiliado a un partido, el PReV, Partido Revolucionario en Vagancia,
cuya personería jurídica está en trámite. Desde hace 23 años. Básicamente,
quienes formamos parte de este espacio político estamos a favor de la
revolución, pero siempre y cuando la realicen otros.
Y entre los candidatos de ayer tengo claramente mi favorito,
pero no voy a dar más datos ni hablar más del tema porque:
a) me da fiaca;
b) no quiero perder el caudal (caudalito) electoral de los
poquísimos lectores que aún me siguen;
c) mi candidato me decepcionó al no hacer ninguna condena
expresa al reguetón y todos los zombis que lo perpetran; ni siquiera hizo
ninguna mención negativa a Arjona.
Hoy comienzo la última serie de la temporada. Es decir, la
última del año. Es decir, quizás, la última que hago, porque ¿quién sabe si
tendré energías para comenzar una cuarta temporada en el 2016? Así que también
para mí este posteo es, en cierta forma, el comienzo del final. (¿O el final
del comienzo?). Y esta serie, titulada “Cuando digo futuro”, se centrará en
eso, en el futuro. Un tiempo que aún no existe, pero que nos rodea, nos marca y
nos obsesiona.
Voy con una presentación doble: dos temas en lugar de uno. Para que vean que a veces sí me esfuerzo.
La canción primera que presentaré es de Black Sabbath. Aunque
en el blog ya comenté temas de Metallica, Pantera, Led Zeppelin, Hearts,
Nirvana, 2 Minutos, etcétera, esta tercera temporada estaba un poco corta de
rock metálico heavy. Pero en esta serie dedicada al futuro me desquitaré, y hoy
empiezo así con los reyes, los emperadores del Metal, el grupo considerado
universalmente fundador y prócer de la música metálica, desde himnos como “Paranoid”
e “Iron Man” y tantos otros. Que comenzaron en los setentas, cuando ni existían
los videoclips, y hoy los tenemos dando vueltas, cuarenta y pico años después,
y produciendo música de calidad, oscuridad al palo y (aunque no lo crean) buena
onda.
Porque la mayoría de los músicos de las bandas metaleras
son, a pesar de su corteza diabólica y su imagen dura, unos dulces. Son más
buenos que el pan. Ozzy Osbourne, considerado por millones de personas lo más
parecido a un dios en la Tierra, fue despedido de Black Sabbath (la Gran Banda
Metalera Original) en 1979 debido a sus problemas personales, pero ahora se
reunieron, en 2013, para grabar el álbum 13
(un número como título del disco, como le gusta a Adele, que está por sacar 25 en pocas semanas), de donde sale esta
hermosa balada. Ozzy cometió montón de errores en su vida (por ejemplo, hacer
un reality show con su familia), pero
nadie le quita ser uno de los cantantes más icónicos del rock de los últimos
cincuenta años, con una voz que reconocerán hasta los aliens, cuando vengan de
visita.
Si leen la letra con atención, verán que Black Sabbath
compuso este tema hace dos años previendo los resultados de los comicios de
ayer. Es evidente.
Verán también que la canción, a pesar de lo súper densa que
es la música, tiene una letra súper buena onda: el futuro es peligroso y
oscuro, pero tenemos la oportunidad de luchar contra él, de “resetear el
sistema” y no ser “un robot fantasma encerrado en un huésped humano” (es genial
ese verso). Hay referencias a un futuro dominado por la informática y las
máquinas y lo inhumano, pero también a la posibilidad de liberarse de todo eso
y terminar, a pesar de los pronósticos y las encuestas apocalípticas, bien.
La música empieza súper morosa, lenta, como yendo golpe a
golpe, casi como un tema lento ochentoso o un bolero (a la manera heavy metal,
claro). Pero a los 2:40, después de decir “El sistema debe ser reseteado”, la
música se resetea y toma otro ritmo, más incesante, más enérgico. Es una
canción larga, de ocho minutos, pero siempre serán ocho minutos bien
utilizados, escuchar a Black Sabbath.
Y la pinta de Ozzy es, de por sí, impagable. Ya verlo me
llena de alegría. Tal vez a ustedes no, pero créanme, somos unos privilegiados
por poder escucharlo aún. Miren, en el videoclip, cómo los asistentes al
concierto colaboran para general el clima de la canción: los recitales de heavy
metal son siempre interactivos, y siempre se realizan (en el sentido de “encuentran
su forma de ser más feliz”) cuando la música es tocada en vivo, y el sistema músicos-público
se retroalimenta y se sobrecarga al palo hasta estallar.
The end of the beginning
Is this the end of the
beginning?
Or the beginning of the end?
Losing control or are you
winning?
Is your life real or just
pretend?
Reanimation of the sequence
Rewind the future to the past.
To find the source of the
solution;
The system has to be recast.
Release your mind.
Fast forward to the secrets of
your code.
Your life's on overload.
Delete or save.
The units that make you an
entity
That's your identity
If you don't know Which way to
go
You may be lost and confused
A second chance
your turn to lose
Regeneration of your cyber
sonic soul.
Transforming time and space
beyond control;
Rise up resist
and be the master of your fate.
Don't look back live for today
- tomorrow is too late.
You don't want to be a robot
ghost
Occupied inside a human host
Analyzed and cloned
relentlessly
Synthesized until they set you
free.
Alright-okay alright till they
set you free...
|
El final del comienzo
¿Este es el final del comienzo?
¿O el comienzo del final?
¿Perdés el control o estás ganando?
¿Tu vida es real, o solo simulás?
Reanimación de la secuencia.
Rebobinar el futuro hacia el pasado.
Encontrar la fuente de la solución:
el sistema debe ser reseteado.
Liberá tu mente.
Fast forward a los secretos de tu código.
Tu vida está sobrecargada.
Borrar o salvar.
Las unidades que te hacen una entidad:
eso es tu identidad.
Si no sabés hacia dónde ir
podés estar perdido y confundido,
una segunda oportunidad,
tu turno de perder.
Regeneración de tu alma cibersónica.
Transformar tiempo y espacio
más allá del control.
Levantate y resistí
y sé el dueño de tu destino.
No mires atrás, viví el hoy:
mañana es demasiado tarde.
No querés volverte un robot fantasma
encerrado en un huésped humano,
analizado y clonado sin pausa,
sintetizado hasta que te liberen.
Todo bien, okey, hasta que te liberen.
|
Ah, qué alivio poder comentar un tema heavy, hacía como un
año que me venía aguantando. Pero ahora que me embalé, sigo con otro. El
segundo tema de este posteo es, en comparación, menos heavy que el de Black
Sabbath, y más simpático, pero es de una banda de rock pesado también,
herederos de Nirvana: los Foo Fighters, liderados por David Grohl (que era el
baterista de Nirvana, pero en su banda curiosamente no toca la batería).
La canción, de 2009, es “Wheels”, es decir, “Ruedas”, y
básicamente es un tema clásico de rock en 4/4. Foo Fighters no son tan oscuros y
depresivos como Nirvana, pero saben mantener (en parte) esa onda tan seductora
que inventó y pulió Kurt Cobain y que dio en llamarse grunge.
“Ruedas”, una hermosa melodía y una gran interpretación, me
recuerda siempre a un verso de una obra de teatro de un tal William Shakespeare
(que no leí, pero me contaron): el viejo rey Lear, que está en una fuerte
bajada del destino, le habla a su hija Cordelia (de las tres hermanas, la única
que no es tremenda arpía) y le dice que está atado a una rueda de fuego, y que
sus propias lágrimas lo queman. La rueda de fuego es, por supuesto, una imagen
del destino, que nos lleva hacia arriba y hacia abajo sin que podamos
desatarnos. El lado bueno sería: si hoy estamos en el fondo, solo cabe ir
mejorando.
Y de eso habla la canción: estamos en el fondo del pozo,
pero estamos buscando una razón, algo para creer en el futuro. “Este es nuestro
comienzo que llega a un final.” Sentimos que todo está perdido, pero eso es
señal de que la rueda llegó al piso y que el futuro nos mostrará un cielo despejado:
hay otra ronda para vos, o al menos, un nuevo round para seguirla peleando.
Evidentemente, también en 2009 los Foo Fighters estaban
pensando en los resultados electorales: los metaleros son videntes, todos lo
sabemos.
Wheels
I know what you're thinkin'
We were goin' down
I can feel the sinkin'
But then I came around
And everyone I've loved before
Flashed before my eyes
And nothin' mattered anymore
I looked into the sky
Well I wanted something better
man
I wished for something new
And I wanted something
beautiful
And wish for something true
Been lookin' for a reason man
Something to lose
When the wheels come down
When the wheels touch ground
And you feel like it's all over
There's another round for you
Know your head is spinnin'
Broken hearts will mend
This is our beginning
Comin to an end
Well, you wanted something
better man
You wished for something new
Well, you wanted something
beautiful
Wished for something true
Been lookin for a reason man
Something to lose
When the wheels come down
When the wheels touch ground
And you feel like it's all over
There's another round for you
|
Ruedas
Sé lo que estás pensando.
Estamos en bajada.
Puedo sentir cómo todo se hunde,
pero entonces regresé
y cada uno a quien amé antes
relampagueó ante mis ojos
y ya nada importaba,
miré el cielo.
Bueno, amigo, quería algo mejor,
deseé algo nuevo
y quería algo hermoso
y deseé algo verdadero.
Estoy buscando una razón, hermano,
algo que perder.
Cuando las ruedas bajan,
cuando las ruedas tocan fondo
y sentís que todo terminó,
hay otra vuelta para vos.
Sé que tu cabeza da vueltas,
los corazones rotos se arreglarán.
Este es nuestro comienzo
que llega a un final.
Bueno, querías algo mejor, hermano,
querías algo nuevo.
Bueno, querías algo hermoso,
deseabas algo verdadero.
Estás buscando una razón, hermano,
algo que perder.
Cuando las ruedas bajan,
cuando las ruedas tocan fondo
y sentís que todo terminó,
hay otra vuelta para vos.
|
Y eso es todo por hoy. Me reseteo hasta la segunda vuelta o,
en su defecto, hasta la semana que viene, cuando cambie pasado por futuro y los
reciba con una nueva canción que nunca escucharon pero tal vez les suene.
DJ Vago
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