“The scientist” de Coldplay (2002), “School” de
Nirvana (1989) y “Be true to your school”, de The Beach Boys (1963)
Nunca fui un buen alumno, pero no por eso me causa gracia que quieran destruir las escuelas y las universidades.
[“La educación no es gratuita, la pagamos todos”, dicen los
quías. Claro que lo hacemos, y con gusto: fomentar la educación y la salud, el
trabajo, la alimentación y la vivienda de toda la gente que vive en el país es
la razón de ser del Estado. O debería: que haya gente que estudia es bueno para
todos, no solo para ellos mismos. Cuando quienes gobiernan le quitan el
financiamiento a esos temas, no es para mejorar la vida de la gente de a pie,
sino para darle esa misma plata a otras personas amigas (de ellos: curiosa o
nada curiosamente, tipos que ya tienen containers llenos de dinero, por lo que
no estaría siendo esencial y urgente que les demos más). No “se ahorra” nada, si
no se le paga lo que corresponde a docentes y científicos, a médicos y
trabajadores en general: se empobrece el país entero, al hacerlo. Deberíamos
darnos cuenta.]
Vamos hoy, entonces, solo porque me hicieron enojar, a
comentar no uno, sino tres temas diversos sobre (poneling) la ciencia y la
educación.
Empiezo por “El científico”, de Coldplay. Acá tengo que empezar
diciendo que Coldplay es una banda que me aburre locamente: la perspectiva de
ver un recital entero de Coldplay me resulta, para decirlo en una sola palabra,
suicidante. Para que se den una idea, esta es mi canción favorita de Coldplay,
y aun así me aburre hasta producirme lipotimia severa e instantánea.
Así y todo, suena bien, la canción, y tiene su gracia
(morosa, pero gracia al fin). Es la historia de un tipo (el científico, aunque
por supuesto, podría no ser un científico en absoluto) que se distrajo “con
números y cifras, con preguntas de ciencia” y no le dio bola a su amada, y
ahora que ella lo está dejando, él no no se resigna, se da cuenta de que la ama
y la necesita y dice “che, qué pena que nos separemos”, y pide “volver al comienzo”.
(Como muchas canciones en inglés, esta es unisex: tanto
quien canta como a quien se dirige podrían ser varones, mujeres o lo que sea,
solo asumo que el cantor es un él y que le canta a una ella por comodidad.)
El estribillo, en el que se dice que “Nadie dijo que fuera
fácil; pero nadie nunca avisó que sería tan difícil”, no hace sin embargo
referencia a la ciencia (y tampoco a la coyuntura actual de nuestro país), sino
a las relaciones humanas: las preguntas de la ciencia y el progreso son un
poroto, en comparación con las cuestiones del amor y el compartir la vida (o
parte de ella) con otro ser humano. Eso es lo realmente difícil, dice el
científico, y le creamos. Y le compadezcamos, porque claro, ese “volvamos al
comienzo” no es posible: los viajes en el tiempo solo pueden ir hacia el futuro
(como la película); volver al pasado solo puede ocurrir en la memoria.
Para sumar a mi desapego con Coldplay, confieso aquí que lo
que más me gusta de esta canción es el videoclip, que me parece de una gran
genialidad: para una canción que propone “volver al comienzo”, está grabada de atrás
para adelante: la escena inicial, con Chris Martin acostado en un colchón
tirado en medio de la calle, no parece nada del otro mundo, hasta que empieza a
moverse y vemos que se mueve raro… entonces cruza una bicicleta yendo en
reversa, y ahí nos damos cuenta de que todo fue filmado normal, pero está
siendo pasado al revés: es como en el cuento “Viaje a la semilla” (que no leí,
claro, me lo contó mi hermana la tercera). Pero, he aquí la mayor gracia, la
boca de Chris Martin dice la letra “bien”, como nosotros escuchamos la canción:
esto no se logró con IA ni con efectos especiales, sino que él tuvo que
aprender a cantar la canción al revés, desde el último sonido hacia el primero.
Le llevó semanas lograrlo, por cierto.
Ya solo con esto, estaría muy bien el clip: pero el cantor
empieza a hacer todo un recorrido, andando hacia atrás como un barco contra la
corriente yendo incesante hacia el pasado: cruza muros y canchas de básquet,
negocios, vías de tren, puentes y un bosque. En el minuto 2:30 del clip, como
está fresca la tarde, se pone un abrigo (aunque claro, eso significa que se lo
quitó, al abrigo, y que lo tenía puesto de antes). En el 2:50 pasa por al lado
de una chica dormida: la trama se complica. Y de aquí en adelante, se sigue
complicando exponencialmente, porque lo que parecía un simple videoclip de una
canción aburrida (sorry fans de Coldplay) es en realidad una historia policial:
en el minuto 3:05 Chris sube a un auto sin parabrisas ahí en medio del bosque
(las preguntas empiezan a bullir en nuestras cabezas, como si los científicos
fuéramos nos); unos segundos después sacude la cabeza para quedarse dormido y
el parabrisas se recompone y la chica dormida (que ahora nos damos cuenta de
que quizá esté muerta) flota hacia atrás para entrar de nuevo en el auto, que
se des-desbarranca parriba hasta volver a la ruta, donde esquiva una camioneta
marcha atrás (3:45) y todo son risas entre él, que maneja, y ella, en el asiento
del acompañante: ese es “el comienzo” al que él quiere volver: el instante en
que los dos estaban vivos y felices.
Queda todavía lugar para responder una pregunta más, el
final del policial de enigma: ¿por qué ella salió despedida por el parabrisas y
él no? ¿Por qué él tenía puesto el cinturón de seguridad y ella no? En los
segundos finales, ella se quita-pone un abrigo (la tarde estaba fresca,
recordemos), y para hacerlo se ajusta el cinturón (es decir: ahí se lo quitó,
cuando uno avanza en el tiempo). Así que este clip bien podría ser la propaganda
de SITEA “luchemos por la vida” para evitar accidentes de tránsito más efectiva
de la historia, al final de cuentas. En todo caso, un gran videoclip, que ganó
muchos premios por cierto, y que hace que la canción, aunque lenta, sea más
memorable.
https://www.youtube.com/watch?v=RB-RcX5DS5A
The scientist Come up to meet you, tell you I'm sorry You don't know how lovely you are I had to find you, tell you I need you Tell you I set you apart Tell me your secrets and ask me your
questions Oh, let's go back to the start Running in circles, coming up tails Heads on a science apart Nobody said it was easy It's such a shame for us to part Nobody said it was easy No one ever said it would be this hard Oh, take me back to the start I was just guessing at numbers and figures Pulling the puzzles apart Questions of science, science and progress Do not speak as loud as my heart But tell me you love me come back and haunt
me Oh and I rush to the start |
El científico Vine a encontrarme con vos, a decirte que lo siento, no sabés lo encantadora que sos. Tuve que encontrarte, decirte que te necesito, decirte que te elegí. Contame tus secretos y decime tus preguntas, oh, volvamos al comienzo. Corriendo en círculos, haciendo que las cruces y las caras caigan en una ciencia distinta. Nadie dijo que fuera fácil: qué lástima que nos separemos. Nadie dijo que fuera fácil: nadie nunca avisó que sería tan difícil. Oh, llevame de nuevo al comienzo. Solo estaba adivinando números y cifras, quitando las piezas de los rompecabezas, preguntas de ciencia; ciencia y progreso no hablan tan fuerte como mi corazón. Pero decime que me querés, volvé y acechame, oh, e iré corriendo hasta el comienzo. |
No se asusten, que me alargué con el posteo pero ahora
comentaré mucho más corto. “School”, de Nirvana, es una canción breve, bien
grunge, bien gritada, de poco más de dos minutos (punk-friendly), donde Kurt
Cobain se lo pasa cantando, pero solo repite tres frases: “¿Lo podés creer? Maldita
mi suerte”. “No hay recreo”. “Estás en el colegio otra vez”. Aquí el cantor
logró ese “volver al comienzo” que se buscaba en la canción anterior, pero, oh
paradoja, no está feliz, porque volvió al colegio pero ahora, sin la
juventud ni el entusiasmo que (ojalá) tenía cuando iba a la escuela siendo
niño. Así que ese sueño de volver (como en el tango de Gardel) es aquí más bien
como una de esas pesadillas en las que uno vuelve al colegio y tiene que volver
a rendir, ad infinitum, para pasar de grado.
El clip es en vivo, así los vemos a los músicos, tan
jóvenes, y lamentamos no poder volver el tiempo atrás.
https://www.youtube.com/watch?v=aattgr1wFcU
School Won't you believe it? It's just my luck No recess You're in high school again |
Escuela ¿Lo podés creer? Mi maldita suerte. No hay recreo. Estás en el colegio otra vez. |
Y para cerrar este viaje al comienzo, retrocedemos aún unas
decaditas más para poner una divertida canción de los Beach Boys, que pueden no
gustarte, pero no te aburrirán. “Sé fiel a tu escuela”, piden (o “a tu colegio”,
si prefieren), como sos fiel a tu chica o a tu chico (o incluso más fiel, si fuera
posible). Porque, como ya sabemos y como dicen los Beach Boys (entre líneas) en
la letra de la canción: la educación no se vende, se defiende. En las calles, en
lo posible. Contra los crápulas que la quieren desfinanciar y vaciar.
https://www.youtube.com/watch?v=o7sLDziV2hs
Be true to your
school When some loud
braggart tries to put me down And says his school
is great I tell him right away Now what's the matter
buddy Ain't you heard of my
school It's number one in
the state? So be true to your
school now Just like you would
to your girl or guy Be true to your
school now And let your colors
fly Be true to your
school I got a letterman's
sweater With a letter in
front I got for footbal and
track I'm proud to where it
now When I cruise around The other parts of
the town I got a decal in back Come Friday we'll be
jacked up on the football game And I'll be ready to
fight We're gonna smash 'em
now My girl will be
working on her pom-poms now And she'll be yelling
tonight So be true to your
school now Rah rah rah be true
to your school |
Sé fiel a tu escuela Cuando un matón
ruidoso intenta menospreciarme y dice que su colegio
es genial le digo al toque: mirá, capo, lo que
pasa es esto: ¿no oíste que mi
escuela es la número uno del
estado? Así que se fiel a tu
escuela, che. Como lo sos con tu
chica o tu chico. Sé fiel a tu escuela y dejá que sus colores
flameen. Sé fiel a tu escuela. Tengo un pulóver con
una letra adelante, Lo uso para el fútbol
y las carreras, estoy orgulloso de
llevarlo ahora. Cuando paseo en el
auto por otras partes del
pueblo llevo una calcomanía
atrás. El viernes estamos
manija con el partido de fútbol y estamos listos para
luchar. Vamos a aplastarlos,
eh. Mi chica estará a tope
con los pompones y gritará esta noche. Así que se fiel a tu
escuela, ahora. Ra, ra, ra. Sé fiel a
tu escuela. |
Y eso es todo. ¿Escuchan el timbre de salida? Es para que
volvamos a entrar, por fin desegresados, a nuestra querida escuela.
DJ Vago