solo un tema por semana,
y con que le guste al diyei alcanza

lunes, 29 de noviembre de 2021

[264] Romántico mal


“I Just Called To Say I Love You”, de Stevie Wonder (1984)


Este hit ochentoso fue el mayor éxito en la exitosa carrera de Stevie Wonder, y además de llegar a ser número 1 en casi todos los rankings del mundo, se ganó un Golden Globe y un Oscar, como canción de la malísima película “La mujer de rojo” (recordada por la icónica escena en la que Kelly Le Brock, totalmente vestida de rojo en un estacionamiento de autos, baila encima de una rejilla en el suelo de la que sale aire y le levanta la pollera, sin darse cuenta de que desde un auto cercano la está viendo Gene Wilder con la boca abierta y babeando; pero en esa escena no sonaba esta canción, sino otra olvidable tonada con sintetizadores).

https://www.youtube.com/watch?v=ZukN1KpIy6M


 

La canción de Stevie es, sin dudas, mejor que la película. Es alegre, optimista, simpática y más fácil que la tabla del dos, lo que explica su instantáneo éxito. La idea es ultrasencilla, y puede sintetizarse con la frase del título. Él la llama a ella, su amada, por teléfono, y cuando ella atiende, él le dice, rodeado de sintetizadores y haciendo sonar todas las alarmas de incendio cursi: “No es año nuevo ni tu cumpleaños, no es navidad ni River salió campeón, no pasa nada particular ni tengo ningún otro motivo: solo llamo para decirte que te quiero”.

(El videoclip también es sencillo: Stevie, en medio de un recital y sentado frente al piano, toma un teléfono rojo y con el tubo en la oreja canta la canción mientras hace sus semigiros icónicos de torso y cabeza.)

https://www.youtube.com/watch?v=VtPLdL5GWDg


I Just Called To Say I Love You

 

No New Year's Day to celebrate

No chocolate covered candy hearts

To give away

No first of spring

No song to sing

In fact here's just another ordinary day

 

No April rain

No flowers bloom

No wedding Saturday

within the month of June

But what it is, is something true

Made up of these three words that I must say to you

 

I just called to say I love you

I just called to say how much I care

I just called to say I love you

And I mean it from the bottom of my heart

 

No summer's high

No warm July

No harvest moon

To light one tender August night

No autumn breeze

No falling leaves

Not even time

for birds to fly

to southern skies

 

No Libra sun

No Halloween

No giving thanks to all the Christmas joy you bring

But what it is, though old

so new to fill your heart

Like no three words could ever do

 

I just called to say I love you

I just called to say how much I care, I do

I just called to say I love you

And I mean it from the bottom of my heart

Solo llamé para decir “te amo”

 

No hay año nuevo que celebrar,

no hay corazones de chocolate

para mandar.

No hay primer día de primavera,

ninguna canción que cantar.

De hecho, acá es solo otro día común.

 

No hay lluvia de abril,

no hay pimpollos en flor,

no hay sábado de boda

en el mes de junio.

Pero lo que hay es algo verdadero,

hecho de estas tres palabras que debo decirte:

 

Solo llamé para decir “te amo”.

Solo llamé para decir cuánto me importa.

Solo llamé para decir “te amo”

y lo digo desde el fondo de mi corazón.

 

No hay entusiasmo de verano,

no hay calor de julio,

no hay luna de cosecha

que ilumine una tierna noche de agosto.

No hay brisa de otoño,

no caen las hojas,

ni siquiera es tiempo

para que los pájaros vuelen

a los cielos del sur.

 

No hay sol de Libra

ni Halloween,

no hay acción de gracias por toda la alegría navideña que brindas.

Pero lo que hay, aunque viejo,

es tan nuevo que llena tu corazón

como ningunas otras tres palabras podrían.

 

Solo llamé para decir “te amo”.

Solo llamé para decir cuánto me importa.

Solo llamé para decir “te amo”

y lo digo desde el fondo de mi corazón.

 

Como la mayoría de los hits pops, esta canción mejora mucho si uno está distraído y no presta demasiada atención a la letra. Porque si uno hila un poquito (no digo ir muy profundo, sino apenas rascar la superficie) se da cuenta de que eso, llamar a alguien para decirle “te quiero”, es algo que no se hace. No está bien.

Mucho menos por un teléfono de línea (que, como vimos en la canción de Blondie del posteo anterior, implica que estamos comprobando/controlando la ubicación de quien recibe la llamada).

¿Es romántico? Ponele que sí. Pero lo es en el mal sentido, diría. Si esa persona a la que estás llamando por teléfono corresponde tus sentimientos, si te ama también y ambos están ya juntos en una relación, entonces se supone que o viven juntos, o al menos pueden verse en persona con cierta frecuencia, ¿para qué necesitás llamarla por teléfono para decirle lo que (se supone) ella ya sabe? E incluso si estuvieran muy lejos y distanciados por algún motivo, cuando llamás a tu amada, si ella te ama también, no la llamás solo para decirle “te quiero”. La llamás para hablar un rato, para escuchar su voz, para preguntarle cómo está, oír lo que sea que tenga para decirte... Llamarla solo para decir “te quiero” es más bien una forma de control, un recordatorio romántico-mafioso, como si te llamara Don Corleone para recordarte que estás metida en una relación sentimental y que no te ocurra olvidarlo, o te enviaremos un amable recordatorio en la forma de una cabeza de caballo o un piquete de ametralladoras.

Y si los dos no están en una relación (si ella es una ex o si simplemente él la ama pero ella a él no), entonces es mucho peor, la canción, pues llamarla por teléfono para decirle “te quiero” resulta mucho más desubicado y amenazador. Salvo que tengas catorce años o estés provisto de otra excusa excelente (por ejemplo, que sos ciego como Stevie Wonder y entonces la llamás por teléfono porque no podés verla).

O claro, podemos hacer oídos sordos, además de cerrar los ojos, y quedarnos pegados solo a la melosa melodía empalagosa: no seremos los primeros ni los últimos, no se preocupen.


Como bonus track, va otra balada ochentosa-telefónica-romántico-psicópata, “867-5309 Jenny”, de Tommy Tutone, en la cual él la llama porque vio el número de teléfono de ella en un graffiti en la pared del baño de varones (“para pasarlo bien, llamá a Jenny...”), y la halaga-amenaza diciéndole: “no soy como todos los demás que te llamaron antes, ahora que tengo tu número tengo que hacerte mía, no se te ocurra cambiar tu número de teléfono; no me conocés pero me hiciste muy feliz” [supongo que está haciendo una referencia a las veces que se masturbó pensando en ella], y termina su arenga repitiendo mil veces el número telefónico en cuestión y reflexionando que “por solo una moneda puedo romperte las bolas y acosarte cada vez que se me da la gana” (no lo dice exacto con esas palabras, pero la idea es esa).

https://www.youtube.com/watch?v=tHL2XeuA6Yg


 

Eso es todo por esta semana. Si les llega a sonar el teléfono y es un número desconocido, atiendan que soy yo, que tengo que decirles algo.

DJ Vago

viernes, 5 de noviembre de 2021

[263] Colgá pero no me cuelgues

 

“Hanging on the telephone”, por The Nerves (1976) y Blondie (1978)

 

Retomo aquí la serie “Pegame un tubazo” sobre canciones telefónicas, que dejé colgada (cuac) unas semanas atrás.

Vamos hoy con la canción “Colgando del teléfono”, que habla de colgados pero en una forma menos dramática que el tema de la semana pasada (cuac de nuevo, estoy re chistoso hoy, pero no se vayan porfi).


Este “estar colgado del teléfono” se refiere a un aspecto de las comunicaciones telefónicas de antaño: cuando vos realizabas un llamado, tenías que quedarte quieto, pegado al teléfono fijo, esperando a que te atendieran del otro lado de la línea. Estabas clavado en el teléfono (o colgando de él), a la espera de que la comunicación se concretara. 


La canción fue compuesta en 1976 por Los Nervios (The Nerves), un trío californiano de rock filo-punk (como, por ejemplo, Green Day, a quienes influenciaron) y formó parte de su primer y único disco, titulado... (sí, adivinaron:) The Nerves. El disco tenía solo cuatro canciones (cada una duraba dos minutos como máximo) y tuvo un éxito que podríamos llamar moderado, si fuéramos bastante mentirosos, porque fue un fracaso rotundo. “Hanging on the telephone” fue compuesta y cantada por el guitarrista de la banda, Jack Lee.

La intro dura exactamente un segundo, y es un tono de llamada telefónica, tras el cual empieza así, de lleno, la voz del cantor que le habla mentamente a su amada y le cuenta que la está llamando desde ahí nomás, desde la cabina telefónica que está cruzando su calle, y le pide que atienda y no lo deje colgado del teléfono o va a dejar que el teléfono suene y suene hasta el infinito. A diferencia de lo que pasaba en las canciones que vimos antes (las de ELO, Kraftwerk y el Paz Martínez), aquí él SABE que ella está en la casa, pero igual, en vez de cruzar la calle y tocar el timbre, la llama por teléfono. Por lo tanto, él SABE que si ella no contesta es porque imagina que es él quien la está llamando y no quiere hablar con él.

Eso hace que rápidamente nos demos cuenta de algo: él es un acosador. Como pasa con “Every breath you take”, de The Police (posteo 106) o “Brown sugar” de los Rolling Stones (hablé de ella un par de semanas atrás), la musiquita alegre y pegadiza hace que muchas veces no nos demos cuenta de lo mal que está eso que estamos escuchando. Este tipo ronda a la chica que era su novia, y aunque ella no quiere atenderlo él la llama y la llama mientras vigila dónde está, y quién entra y sale de la casa de ella (en la segunda estrofa él ve, desde la cabina, que la mamá de ella sale por la puerta de calle y él entonces se pregunta si la vieja va al trabajo o solo al almacén, porque eso definirá si la chica estará sola en la casa por un rato o durante horas. Y le recuerda a la chica, aún mentalmente, que le había ordenado que olvidara todas las cosas (evidentemente malas) que esa madre había dicho sobre él.

No sé qué les parecerá a ustedes, pero para mí, en este contexto, el “No me dejes colgando en el teléfono” que repite él suena más a amenaza que a ruego. Y cuando él pregunta “¿Por qué no podemos volver a hablar?”, suena a que nunca va a aceptar un “no” como respuesta: vas a hablar conmigo o vas a hablar conmigo.

Llegamos entonces a la tercera estrofa y todo cambia, porque ella hace caso, levanta el tubo del teléfono y atiende el llamado. Él entonces sigue hablando con ella, pero ahora de verdad, no solo en su mente. Le dice “qué bueno es escuchar tu voz” pero enseguida le recrimina que pasó demasiado tiempo sin que hablaran y sin que ella lo llamara, lo que hace que “todo le salga mal” a él (culpa de ella, obvio). Y como cierre de la estrofa, le dice: “Quiero contarte algo que sabés desde siempre”. Probablemente, que la ama, aunque no es la única posibilidad. En todo caso, si ella lo sabe, no es necesario que él se lo repita, ¿no? Salvo que quiera repetirlo para que a ella no se le olvide más, que no se retobe. A esta altura de la canción todo me suena bastante siniestro, qué quieren que les diga.

Y en la cuarta estrofa se da un nuevo giro: él, que tan desesperado estaba porque ella lo atendiera, ahora que lo atendió le dice que tiene que cortar, porque la voz de ella le produce “una extraña sensación” (calentura, supongo) y por eso le gustaría seguir hablando con ella pero presencial y sin barbijo, para “mostrarle su afecto”, pues él ya “no puede controlarse”. Y la canción cierra con una nueva orden hacia ella: que cuelgue el teléfono y corra hacia él (se supone que ya le contó que está a pocos metros, cruzando la calle).

En fin: es un rock pegadizo, cuasi punk (pero no punk), cuasi ska (pero no ska) y cuasi Beatles (pero no Beatles), lo que unido a esta letra bastante ambigua, explica para mí que casi nadie le haya dado bola a esta canción.

Dos años después de la salida de esta canción, su autor, Jack Lee, estaba en la ruina. No tenía un mango. Era el mediodía del viernes, y a las seis de la tarde de ese mismo día le iban a cortar la luz, el gas y el teléfono, porque no los había pagado. Entonces recibió un llamado telefónico: atendió rápido. Era Debbie Harris, la cantante de Blondie, que le preguntó si podía grabar un cover de su canción.

Imagínense que Jack Lee le dijo que sí tan rápido y tantas veces que casi la asusta, a Debbie. En los años siguientes, Jack dijo, más de una vez, que ese llamado inesperado le había cambiado la vida.

Así fue como “Hanging on the telephone” formó parte de Paralell Lines ("líneas paralelas"), el disco más famoso de Blondie, y la canción llegó al top ten en todos los charts, y así Jack Lee pudo evitar que le cortaran el teléfono y pudo pagar la luz.

Como suele pasar (recuerden, por ejemplo, “Las chicas solo quieren divertirse”, de Cindi Lauper, posteo 174), cuando una mujer hace un cover de una canción originalmente hecha por un varón, esa canción puede cambiar bastante, aun sin que cambie su letra ni su música. Debbie solo cambió un pronombre, en toda la letra: “Sé que él está [en la casa], pero igual tengo que llamarlo”, dice, en lugar de “ella está”. Mantiene todo el resto de la letra y mantiene la música tal cual, aunque los de Blondie la hacen un poco más punk e informal, un poco menos prolijita y más divertida y nerviosa que la original de Los Nervios.

O sea: sigue siendo un stalkeo, pero no es lo mismo que un tipo acose a una chica que no le da más bola a que una chica rubia y de ojos claros acose a un muchacho. Está igual de mal, quizás, pero suena bien distinto, aunque más no sea porque es más difícil imaginar que Debbie Harris te va a agarrar a puñaladas si no le atendés el llamado.


Hicieron un clip, además. El clip de la versión de Blondie es más que sencillo: vemos a los integrantes de la banda llegando al estudio de grabación y preparándose para cantar esta canción, y luego cantan esta canción. Le ponen onda, eso sí, y mucha energía: solo miren las caritas y gestos que van haciendo Debbie Harris y Jimmi Destri (el de saco violeta que sostiene durante largo rato sobre su cabeza un teléfono rojo, antes de decidirse a tocar el teclado durante unos segundos). Hacia el final, mientras va diciendo “Colgá y corré hacia mí”, Debbie hace el clásico gestito de “vení para acá” con los dedos que luego perfeccionaría Meatloaf en “Dead Ringer for Love” (vean el posteo 26, si no saben de qué hablo).

Y esto explica por qué la versión de Blondie es la que se hizo memorable y se sigue cantando aún mucho después de que ya no existan más las cabinas telefónicas de Entel.

 

https://www.youtube.com/watch?v=emy5mA8Ixtc



https://www.youtube.com/watch?v=uWhkbDMISl8



Hanging on the telephone

 

I'm in the phone booth,

it's the one across the hall

If you don't answer,

I'll just ring it off the wall

I know she (he)'s there,

but I just had to call

 

Don't leave me hanging on the telephone

 

I heard your mother,

now she's going out the door

Did she go to work

or just go to the store?

All those things she said,

I told you to ignore

 

Oh, why can't we talk again?

 

Don't leave me hanging on the telephone

 

It's good to hear your voice,

you know it's been so long

If I don't get your calls,

then everything goes wrong

I want to tell you something you've known all along

 

Don't leave me hanging on the telephone

 

I had to interrupt

and stop this conversation

Your voice across the line

gives me a strange sensation

I'd like to talk when

I can show you my affection

 

Oh, I can't control myself

Don't leave me hanging on the telephone

 

Hang up and run to me.

Colgando en el teléfono

 

Estoy en la cabina de teléfono,

esa que está cruzando el salón.

Si no contestás

voy a arrancarlo de la pared a rings.

Sé que ella (él) está ahí,

pero igual tenía que llamar.

 

No me dejes colgando en el teléfono.

 

Escuché a tu mamá,

ahora está saliendo por la puerta,

¿va a trabajar

o solo a comprar al almacén?

A todas esas cosas que ella dijo

te dije que las ignoraras.

 

Oh, ¿por qué no podemos volver a hablar?

 

No me dejes colgando en el teléfono.

 

Es bueno oír tu voz,

sabés que pasó tanto tiempo.

Si no recibo tus llamados,

entonces todo sale mal.

Quiero contarte algo

que sabés desde siempre.

 

 

No me dejes colgando en el teléfono.

 

Tengo que interrumpir

y detener esta conversación.

Tu voz a través de la línea

me produce una extraña sensación.

Me gustaría hablar cuando

pueda mostrarte mi afecto.

 

Oh, no puedo controlarme,

no me dejes colgando en el teléfono.

 

 

Colgá y corré hacia mí.

 

Y eso es todo por hoy. Cortémosla de una vez, que tengo que ir a dormir la siesta. Cuelguen, pero no ME cuelguen, por favor.

DJ Vago